Mandala Spa & Resort Villas, Manoc-Manoc

Mandala Resort y Spa es un lugar realmente mágico en Boracay. Las villas son amplias y hermosamente decoradas, ofreciendo una experiencia de tranquilidad. El personal es excepcionalmente amable y servicial. Sin embargo, el menú del desayuno es algo limitado y los precios de la comida son un poco altos en comparación con otros lugares cercanos. A pesar de eso, la calidad de la comida es buena y el ambiente es muy agradable.

Mandala ofrece una experiencia increíble en un entorno mágico. Las habitaciones son amplias y cómodas, perfectas para relajarse, pero tuvimos algunos problemas con el agua caliente en la ducha. El servicio es excepcional, brindando una atención al cliente que realmente te hace sentir especial. Sin embargo, hubo algunos inconvenientes con la limpieza que podrían mejorarse. A pesar de eso, el lugar está rodeado de naturaleza y ofrece una paz absoluta, ideal para desconectar.

Mandala Spa es un lugar encantador con un ambiente tranquilo, ideal para parejas y aquellos que buscan relajación. Las villas son amplias y cómodas, con vistas impresionantes. La atención al detalle por parte del personal es excepcional, aunque la falta de un restaurante para cenar en el lugar es un inconveniente notable. El desayuno, aunque limitado en opciones, es delicioso y saludable, y el acceso a la playa requiere una pequeña caminata, lo cual puede ser incómodo después del anochecer.

El hotel es un refugio tranquilo en Boracay, con un ambiente relajante y un personal amable que te hace sentir bienvenido. Las instalaciones son hermosas y muy limpias, aunque el acceso a la playa implica algunos pasos que pueden ser incómodos. Los tratamientos de spa son destacados, pero podrían mejorar la atención en el área de recepción. En general, una buena experiencia pero con algunos detalles a afinar.

El hotel tiene un diseño encantador y se ubica en una colina con vistas al mar, pero la experiencia no fue del todo satisfactoria. Reservamos una villa con piscina para mi cumpleaños, pero hubo problemas con la reserva y el mantenimiento. A pesar de su potencial, la falta de atención a los detalles y el servicio al cliente dejaron un mal sabor de boca. Además, la oferta del desayuno era limitada y decepcionante para un hotel de este nivel.